¿Es la evitación del castigo el mejor incentivo para lograr que los equipos de trabajo funcionen correctamente? ¿Es el miedo el recurso más adecuado para promover un clima laboral saludable y atractivo? La comunidad científica lleva ya un tiempo arrojando respuestas y concluyendo que existen innumerables estrategias de liderazgo mucho más rentables y productivas que el miedo. A corto plazo, este puede contribuir a alcanzar los objetivos esperados, pero... ¿qué sucede a medio y largo plazo?, ¿cuál es el peaje de esta práctica cuando forma parte inseparable de un estilo de liderazgo, la salud o el clima laboral?
El miedo, entre otros muchos efectos, contribuye a levantar grandes barreras en la comunicación, coartando aquellos intercambios espontáneos que aportan valor a la mejora y el crecimiento. Un ejemplo de ello es el conocido Síndrome del CEO o de la Moncloa, mediante el cual se evita trasladar/comunicar, quejas, denuncias y aquellas cuestiones con un cariz negativo por temor a las represalias. Es lo que se conoce coloquialmente como “matar al mensajero o ponerle el cascabel al gato”.
La esperanza queda así arrinconada en el mostrador de objetos perdidos, mientras el talento migra y se oscurece cualquier atisbo de proyección y Desarrollo Profesional.
Esta es la realidad que la Dirección de Cruz Roja en la Comunidad de Madrid mantienen en estos momentos a la plantilla. Trabajadores con una carga laboral que les desborda y que es nociva para su salud.
Estamos acudiendo a Despidos, Expedientes Disciplinarios, por no alcanzar Objetivos según sus criterios, se están haciendo valoraciones a mediados de años para ver los datos sin que seamos conscientes sin que se nos comunique para ver las posibles causas y ver las modificaciones necesarias. Pero lejos de toda la lógica abren expedientes disciplinarios terminando en despidos que lejos de ser objetivos como alega la Institución, se convierten en despidos improcedentes.
En menos de 10 días llevamos 4 Expedientes Disciplinarios, 1 despido objetivo y como consecuencia ya somos menos en plantilla, se percibe una estrategia de echar a la gente más antigua sin justificación objetiva, con los hechos denunciados prescritos, fuera de tiempo y forma, con la clara intención de abaratar los puestos de trabajo cambiando a indefinidos por temporales. En pocos meses son muchos los que salieron de Cruz Roja C. Madrid, sin pagarles las indemnizaciones que por Ley les corresponden y posteriormente con las denuncias se gana lo que les corresponde.
Para esta mala gestión se utilizan los Fondos Propios de las cuotas de Socios, Sorteo de Oro, etc… para las indemnizaciones, este año cuando nos digan que hay que salir a vender los boletos del sorteo de oro pensar que luego ese dinero será utilizado en las indemnizaciones de nuestros compañeros/as. Esto NO es utilizar los Fondos Propios para esta “Cada vez más Cerca las Personas”
Este clima hostil y de miedo es al que debe enfrentarse la plantilla día a día, donde cualquier error, genera tensión, donde la carga laboral desborda a las personas y todo esto, conocido por la Dirección.
La Dirección de Cruz Roja en la C. Madrid se ve incapaz de emplear otras alternativas, que al contrario del miedo, puedan fomentar picos de tensión saludables, capaces de conducir los proyectos a buen puerto y motivar y orientar a los equipos de trabajo en la dirección adecuada.
Lamentamos profundamente esta situación de la que no se están haciendo eco otras secciones, desde CCOO os invitamos a que denuncies desde nuestra página Web todas estas cuestiones, ponemos a vuestra disposición un altavoz que está siendo seguido por muchas personas y que esta enlazada a otras Web. No es necesario que pongáis vuestro nombre, publicaremos vuestras respuestas anónimas. No podemos seguir en silencio mientras vemos como despiden a nuestros compañeros/as, la unión hace la fuerza y con la fuerza se consiguen los cambios, no es el momento de mirar para otra parte.
CCOO: Queremos agradeceros toda la información que habéis puesto en nuestro conocimiento y por los, comentarios y sugerencias recibidas. Seguimos trabajando para vosotras/os.